Manifiesto

Como emprendedores amantes de la tecnología nos quita el sueño mejorar la baja tasa de éxito que tienen los emprendimientos a nivel global. Basados en nuestra experiencia creando negocios y apoyando a otros a desarrollar los suyos, estamos continuamente buscando las mejores formas de crear nuevos negocios tecnológicos.

En ese sentido, si bien valoramos la madurez que los ecosistemas de emprendimientos tecnológicos han ido adquiriendo, consideramos que se han producido algunas distorsiones que son perjudiciales para los emprendedores, siendo algunas:

- Creer que no puedes emprender si no tienes un CTO a tu lado.
- Priorizar las apariciones en prensa por sobre dedicarse el negocio y entender las necesidades reales (y cambiantes) de los clientes.
- Aplicar tecnologías por moda (technology-first thinking).
- Derroche absurdo de recursos.
- Creer que se necesita un gran producto para salir al mercado.
- Adecuar todo tu emprendimiento a lo que promueve o quiere una aceleradora o inversionista.
- Creer que emprender es fácil y glamouroso.

Principios

1. Preferimos negocios sólidos por sobre unicornios frágiles.
2. Todo lo que suponemos lo validamos de forma rápida y barata a través de experimentos.
3. Cada emprendimiento es único, tiene sus propias necesidades y su propio camino.
4. Las personas son lo más importante en todo lo que hacemos.
5. Un buen negocio está conformado por los mejores: buenos profesionales, pero sobre todo, excelentes personas.
6. No tenemos miedo a fallar: todo lo contrario, buscamos que las cosas fallen lo más rápido y barato posible y aprovechar ese aprendizaje.
7. Nos encanta construir SaaS, sobre todo B2B.

Buscamos ser:

- Sustentables: capacidad de generar múltiples startups sucesivamente durante un periodo prolongado de tiempo, aumentando su tasa de éxito.

- Eficientes: nos beneficiamos de las economías de escala, estandarizamos y aumentamos sostenidamente nuestra base de conocimiento y experiencia colectiva.

- Formadores de startups viables: que les va bien, con clientes que pagan, que crecen sin mayores fricciones de mercado y puedan ser autosostenidas en un plazo razonable.

- Antifrágiles: buscamos fallar inteligente: rápido, barato y con aprendizaje

- Recicladores: todo lo que hacemos es reusable por otras startups, además de reasignar recursos de iniciativas fallidas y aprovechar el aprendizaje adquirido.